Te tengo un propósito de vida, Imagina despertar un día sin miedo a nada. Que despertáramos con la mentalidad de hacer de éste, un gran día. Un día lleno de optimismo y ganas de regalar amor, de engrandecernos y motivarnos unos a otros.
Hoy me inspira hablarte de lo que hace el bien. De transformar tus miedos desde adentro. Porque ahora lo que pareciera que nos mueve y nos lleva a actuar de una forma desordenada e insegura es el miedo. Miedo a decir lo que piensas, miedo a lo que piensan los demás de ti, miedo a expresar lo que te gusta por no ser juzgada, miedo a parecer extraña, a no encajar en sociedad, a equivocarte, a decir lo que piensas. Miedo a actuar, sin darnos cuenta que por esos temores estamos dejando que muera algo dentro de nosotros; sin disfrutar, ni explorar una vida llena de oportunidades para todos.
Siempre pensando en no hacer ruido para que no copien tu idea, para que no roben lo que atesoras, ¿por qué permitir que nos gane el egoísmo en lugar de compartir, de ayudar, de crecer y buscar el bien para todos? ¿por qué no pensar en que si te va bien a ti, también me puede ir bien a mí?, tal como cuando quieres mucho a una amiga o a tu madre y quieres lo mejor para ella, claro que le recomendarías lo mejor cierto?
Nos estamos perdiendo la oportunidad de compartir y aprender de otras personas.
Da dar y recibir amor incondicionalmente. Te propongo dejar de sentir miedo hoy y salir a vivir, a dar, recibir, compartir, escuchar, aprender, enseñar, a dejar de actuar con envidia, con decepción, a dejar de criticar, de juzgar, de burlarnos, dañar o herir y mejor dejemos vivir a los demás. Con sus sueños e ilusiones. Ya cada uno tiene consigo su propia batalla de vida, sus propios obstáculos como para nosotros ser uno más. Ayudemos a fortalecernos unos a otros, compartiendo experiencias y ayudando en nuestras posibilidades.
Te invito a compartir, a dar más amor, a reconocer algo bueno de cada persona que te pase al frente, desde su físico, hasta una prenda, su tono de voz o cualquier cosa que te parezca positiva, antes de fijarte en su “cara de amargura o mal carácter” ya que, al final, «lo que ves en otro es tu propio reflejo», por eso busca siempre verte bien en los ojos del otro.
Comparte de ti lo mejor, tus conocimientos, ¿te conoces una ruta fácil? ¡Compártela! te sabes una receta de cocina buena? ¡Compártela! ¿tienes algún tip de lo que sea? Compártelo! ¿conociste un nuevo lugar? ¡Déjame conocerlo a través de tus fotos!
No te quedes con nada, descubre y comparte lo mejor de ti. No existe mayor obstáculo que los que nos ponemos nosotros mismos, no temas mirar adelante con bondad, siempre en busca de lo bueno que hay en ti y en los demás.
Con cariño,
Mía.